Este es sin dudarlo el segundo alojamiento más especial de mi viaje por Japón. El otro te lo explicaré más adelante. La página web que tienes indicada más abajo, no le hace justicia ni al establecimiento ni al lugar dónde se encuentra.
Está ubicado en medio del Parque Nacional de Yoshino , entre unos bosques de película y montañas escondidas por la bruma, a 15 minutos caminando del Templo Zaodo.
El Ryokan es un alojamiento típico tradicional japonés dónde se duerme en un futón sobre un tatami (una especie de tarima tipo bambú.. no estoy segura que material es).
Las habitaciones son minimalistas combinando TV, enchufes y máquina de té con sillas sin patas para sentarse a ras del suelo y con tu kimono por si quieres sumergirte por completo en su mundo. Dispone de amplias habitaciones para compartir hasta para 5 personas (alguna con baño privado).
El Ryokan es todo de madera. Llaman la atención uno de sus amplios amplios salones con unas espectaculares vistas en plena natura y terrazas dónde relajarse después de una sesión de aguas termales en los onsen.
Los baños son compartidos (hay uno para hombres y otro para mujeres) y cuentan con diferentes duchas, todo tipo de productos de aseo, una piscina de agua caliente interior y otra exterior.
La cena del hotel es muy muy recomendable. Cena tradicional japonesa variada con diferentes carnes, pescados , otros platos y el imprescindible TOFU (…. que hartura de TOFU !!!). El desayuno es muy copioso y se sirve en una pequeña cafetería enfrente del ryokan. Puedes escoger entre desayuno occidental o japonés.
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