Esta región del sur de Francia es una de mis preferidas. La variedad de paisajes entre los Pirineos y el mar Mediterraneo, así como la oferta cultural están garantizadas. Los espacios naturales tienen un valor añadido porque albergan pueblos pintorescos en sus laderas y hacen de la escena una fotografía perfecta.
Entre los recursos turísticos con los que cuenta se encuentran las ciudades medivales de Carcassone (que conserva la muralla medieval y su ciudad intactas), Narbone, Montpellier, Nimes o Perpinyà. Una buena excusa con la que visitar la región es iniciar el Camino de Santiago (dos de los principales caminos pasan por Languedoc: el de ozère y el del sur que pasa por el Gard ), recorrer la Ruta de los Cátaros o navegar por el Canal du Midi.
Aunque si quieres otra razón de peso es su gastronomia y sus vinos. Grandes extensiones de viñedos salpican estas tierras productoras de una marca con el sello de la denominación de origen.
RECOMENDACIONES
- El Parque Nacional de Cevenas es reserva mundial de la Biosfera. Es perfecto para excursiones a pie o en bicicleta. Tiene numerosas rutas de senderismo y te acerca hasta los Pirineos.
- La cassoulet es un plato típico del Languedoc. En una cazuela de barro se cuecen judías con confit de pato, tocino, chorizo y según la zona perdiz o cordero. !!mmmmm… que bueno !!!
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