Las cataratas del Niágara dividen la frontera entre Estados Unidos y Canadá. Este complejo de cascadas de diferentes niveles es uno de los tesoros más preciados de nuestro planeta. Se encuentra a una media hora en coche de Buffalo por el lado estadounidense.
El estruendo de las cataratas rompiendo el agua es impresionante. Ataviado con unas gabardinas, puedes subir en el Maid of the Mist, un barco que opera de abril a octubre y que te permite ver las cataratas desde el río. La experiencia es única, a pesar de que la sensación de “turistada” no te la quita nadie.
Alrededor de este regalo de la naturaleza, se han montado toda una de hoteles, restaurantes y tiendas dirigidas a los turistas. Los precios en general son elevados, sobretodo las habitaciones con vistas a las cataratas, por eso antes de decidirte a comprar o a reservar una habitación, compara un poco los precios.
Además tienes muchas atracciones con las que disfrutar durante tu estancia (aunque con 1 noche es suficiente) : cruzar el Rainbow bridge que une los tres grandes saltos de las cataratas, ver los arco iris que se forman en las orillas del río en el parque Victoria, atravesar las cataratas a través de los túneles, subir en teleférico (no recomendable si te asustan las alturas)
RECOMENDACIONES
- Por las noches hay un espectáculo de luces muy bonito. Puedes comerte cualquier bocata en alguno de los puestos de comida rápida (recuerda que estás en el reino del fast food) y disfrutar del show. Si es invierno, abrígate porque hace un frío espantoso.
CURIOSIDADES
- Seguro que recuerdas la película Niagara de Marilyn Monroe. Fue gracias a esta película en 1953 que su fama ascendió y empezó a protagonizar papeles de actriz principal. O la mítica escena dónde Superman rescata a ese niño que se cae aguas abajo. He leído que en Superman returns iban a recrear de nuevo la esta escena de Superman II, pero al final lo descartaron.
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